UGT celebrará su 43 Congreso Confederal bajo el lema “REDvolución 6.0. Por un Nuevo Contrato Social y Medioambiental” expresando así la necesidad de imbricar el trabajo sindical y la defensa de los derechos de los trabajadores y trabajadoras en un contexto amplio, que va más allá de lo estrictamente laboral, porque el futuro del trabajo y de las personas trabajadoras se juega también en la configuración de un nuevo paradigma económico compatible con el sostenimiento de nuestro medio natural y que tenga como prioridad a las personas.
tanto a nivel internacional como en nuestro país, estamos en un momento crítico en el que debemos tomar decisiones estratégicas que tendrán su desarrollo en las próximas décadas. La lucha contra el cambio climático, la digitalización, la reconstrucción económica tras haber sufrido dos grandes crisis en una década, la reducción del tiempo de trabajo, el deterioro de la calidad de las democracias occidentales y la reaparición de viejas ideas totalitarias o directamente fascistas, son algunos de esos retos en los que los trabajadores y trabajadoras tienen mucho que decir.
El trabajo sigue siendo la base de nuestras sociedades, la base de los sistemas fiscales y los sistemas de protección social, el ser o no ser de cualquier proyecto vital, un factor de cohesión y estabilidad social, de integración, de progreso. Pero desde hace décadas las ideologías dominantes han relegado al trabajo y los trabajadores a posiciones secundarias en las listas de prioridades, provocando una explosión de las desigualdades, desequilibrios económicos y medioambientales, fracturando las sociedades y generando desencanto y desconfianza en las instituciones y en el futuro. Hay que abrir una nueva etapa y para eso necesitamos un nuevo Contrato Social y Medioambiental. Necesitamos poner a las personas en el centro de las políticas.
Ahora que nos enfrentamos a esos retos estratégicos enumerados al principio, tiene todavía más importancia si cabe no olvidar que el derecho al trabajo está por encima del desarrollo tecnológico, que respetar los equilibrios del planeta tiene como objetivo último que siga siendo habitable, y que ningún progreso debería suponer condenar a la población a la pobreza, la explotación, la incertidumbre, la falta de derechos.
Todo esto debe ser articulado en políticas concretas que permitan el reparto de la riqueza y la ampliación de los derecho y libertades. Los trabajos del 43 Congreso de UGT giraran en torno a más de un centenar de propuestas destinadas a crear empleo y mejorar su calidad, erradicar la pobreza, garantizar la sostenibilidad del Estado de bienestar (especialmente sanidad, dependencia y pensiones), luchar contra la desigualdad entre hombres y mujeres, y combatir las discriminaciones sea cual sea su origen.
