Salir de la pandemia con más derechos

El Primero de Mayo ha vuelto a la calle dejando claro que también hay que salir de la pandemia desde el punto de vista de recuperación de derechos. Por eso el lema de esta convocatoria era “Ahora toca cumplir”, un mensaje directamente dirigido al Gobierno para recordarle que tiene compromisos con la ciudadanía, que tiene una agenda de reformas pendiente. 

Esos compromisos están en los programas electorales de las últimas elecciones generales, y están en el acuerdo del Gobierno de coalición.

Los fondos europeos del Plan de Recuperación son, además, una gran oportunidad, porque Europa nos está pidiendo que invirtamos para mejorar nuestro sistema productivo, para avanzar ambientalmente, avanzar en igualdad y en mejorar los servicios públicos. No nos están pidiendo nuevos recortes, y por eso el Gobierno no puede utilizar a la UE como excusa para retrasar más las reformas comprometidas.

Y son claras. Derogar las reformas laborales, derogar la reforma de pensiones del año 2013, revalorizar el Salario Mínimo Interprofesional para que al final de la legislatura alcance el 60% del salario medio neto, como dice la Carta Social Europea. Configurar una negociación colectiva equilibrada para que cumpla su función, que no es otra que ser un mecanismo de reparto de la riqueza y de democracia social.

El trabajo hecho durante la crisis para proteger el tejido productivo y para levantar un escudo social que protegiera la rentas de los trabajadores y trabajadoras es indiscutible, pero es insuficiente. ¿Quién con un planteamiento ideológico progresista, y menos un Gobierno de izquierdas, puede sentirse satisfecho mientras en nuestro país sigue habiendo colas del hambre y gente viviendo en la calle? ¿Podemos seguir manteniendo en pie y plenamente vigente una legislación laboral hecha para despedir, para rebajar salarios, para eliminar derechos laborales? ¿Podemos mantener los famélicos servicios públicos que dejaron los Gobierno del PP durante la crisis a base de recortes y privatizaciones?

Hay que recuperar la ultractividad de los convenios, y la prevalencia del convenio de sector sobre el de empresa. Hay que combatir la precariedad y la ilegalidad porque mientras a un empresario le siga saliendo más barato contratar irregularmente que cumplir las normas no hará lo que tiene que hacer. Hay que poner coto a la siniestralidad laboral. Necesitamos un sistema impositivo justo, para que pague más el que más tiene, y para eso hace falta una reforma fiscal integral.

Hay que empezar a salir de la pandemia con la firme convicción de que tenemos una gran oportunidad de transformación, una oportunidad que, esta vez, tiene que ser para mejorar la vida de la gente.

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