Las acciones contra el cambio climático no pueden esperar
La problemática medioambiental y el cambio climático es un reto que pone en peligro la igualdad, los derechos humanos y la prosperidad y que requiere la implicación en la consecución de una transición justa donde los trabajadores y las trabajadoras puedan decidir sobre el futuro. Nadie puede quedar atrás.
Para lograrlo hay que velar, por un lado, porque el empleo que se cree y el que se transforme sea respetuoso con el medio ambiente y que, además, sea empleo digno y de calidad y, por otro, por realizar una transición justa donde nadie se quede atrás.
Este ha sido uno de los objetivos de UGT en la 14ª edición del Congreso Nacional del Medio Ambiente –CONAMA 2018- que, con el lema ‘Rumbo 2030’, ha destacado la importancia de que España cumpla los retos comprometidos en la Agenda 2030 de la ONU así como los objetivos de la UE para 2020, 2030 y 2050.
El sindicato también participó en la en la Cumbre del Clima de la ONU (COP 24) celebrada en Katowice (Polonia) donde expuso los mismos planteamientos y apoyó la Declaración de Silesia sobre Solidaridad y Transición Justa.
Para afrontar la transición hacia una economía baja en carbono, España necesita un marco regulatorio estable y de futuro. La Ley de Cambio Climático y Transición Energética es una herramienta fundamental y, por ello, es importante garantizar un alto consenso en su elaboración de modo que la participación de los interlocutores sociales en todo el proceso es absolutamente necesaria.
Esta ley supone una apuesta estratégica, que tendrá efectos sobre los métodos y modelos de producción, sobre la prestación de servicios y los hábitos de consumo, afectando a toda la economía y, por tanto, a las personas y puestos de trabajo.
Tenemos que ser conscientes de que serán las personas quienes finalmente van a verse beneficiadas si las cosas se hacen correctamente o sufrirán las consecuencias en caso contrario.
Elaborar un Plan Estratégico
En este sentido, es primordial que la Ley de Cambio Climático y Transición Energética que se está elaborando vaya acompañada de un Plan Estratégico de Transición Justa que:
- Se desarrolle desde el diálogo entre los distintos Ministerios implicados y los interlocutores sociales y no deje al margen a los trabajadores y trabajadoras.
- Cuente con medidas específicas de apoyo a los sectores e industrias afectados.
- Incluya la protección de las personas más vulnerables al proceso de transición energética.
- Diseñe planes de reactivación territoriales, en los que prime la diversificación de actividades económicas.
- Incluya planes de formación y capacitación de los trabajadores y trabajadoras en relación a los nuevos empleos verdes.
- Y establezca un fondo económico para este Plan Estratégico a través de una fiscalidad verde y de los PGE.
